sábado, 27 de febrero de 2016

¡Yo le arrebato a Dios mi milagro y al diablo lo que me ha quitado! - Por Natalie Pais.


¿En serio? ¿Es esto cierto, es bíblico?



“pedís y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.” Jacobo 4:3

   Debemos iniciar este artículo, con una explicación breve sobre la práctica y expresión NO BÍBLICA de “ARREBATAR” entre otras más como: decretar, declarar, visualizar etc. Se nos ha enseñado esto, en la mayoría de las congregaciones institucionales o por ministros, evangelistas en sus predicas. Lo vemos también en congresos, conferencias, en oraciones y hasta en canciones como la titulada “YO Arrebato lo que es mio”.

   Lamentablemente esta palabra, es parte del vocabulario de muchos cristianos que todo lo repiten, pero peor aun: ha terminado aceptándose como una “verdad”.

   No es extraño ver a muchos hermanos orando por sus hijos incluso, familias “arrebatando” sus almas para Cristo, o un padre de familia con una deuda económica “arrebatando” el “bienestar” o la “riqueza” que satanás le ha “robado”. 

¿Por qué esto? Bueno, sucede porque muchos “líderes” enseñan que se puede solucionar muchas cosas solo con decir la palabra “arrebatar”, y tristemente es una práctica que vemos hoy en todos lados.

Es importante comenzar con el contexto de (Mateo 11), este pasaje, se trata del reino de los cielos (también llamado el reino de Dios), vale la pena notar primero que cuando vino Jesucristo, los judíos esperaban la venida del Mesías (el ungido el rey) para restaurar el poder del reino de Dios a la nación de Israel. No obstante, su concepto era de un reino nacionalista (de Israel) y materialista (poder militar) que los libraría del imperio romano. Suponían que el Cristo (el Mesías) sería exitoso líder de batalla (como el rey David) y que les ayudaría a volver a la supremacía política y la abundancia material que gozaron durante el reinado de David y su hijo Salomón. Aún los discípulos de Jesucristo, al principio, malentendieron la naturaleza del reino y algunos de ellos buscaban posiciones de autoridad e importancia en el reino con Cristo (Marcos 10:35-37; Lucas 22:24-27). 

Veamos en  Mateo 11, la pregunta que los discípulos de Juan el bautista le traen a Jesucristo es: “¿Eres tú el que ha de venir, o esperaremos a otro? (11:1-3). 

Aquí, El Señor Jesús se refiere a las obras que Él hacía y pronuncia una bendición sobre el individuo “anuncian las buenas nuevas” (11:4-6). 

Luego habló con las multitudes que antes habían llegado a Juan. Les reafirma la grandeza espiritual de Juan, pero declara que “el más pequeño en el reino de los cielos es mayor que él”, señalando así la bendición superior del reino de Dios que estaba por comenzar (11:7-11). Más adelante veremos  qué pasa con (Mateo11:12).

Como podemos apreciar, este contexto general y el reino que el Señor Jesús afirma, es desde el inicio del ministerio de Juan el Bautista hasta el momento en el que les estaba hablando “el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan”.

¿YO ARREBATO A JESÚS LOS MILAGROS QUE SON PARA MÍ?

   Leí en un artículo de un hermano con un título así: “La doctrina de arrebatar tiene mil caras”, después al analizar lo que allí explica, vi que la respuesta es Sí, tiene más de una cara. Por esta razón decidí escribir sobre el “YO ARREBATO”.

   Debemos tener cuidado con creernos súper héroes, quitándole a Dios o al diablo las cosas que nos pertenecen, o que se nos han quitado. Enseñar el “YO ARREBATO”, es una muy mala cosa. ¡Cuidado! 

   Muchos  predicadores no siempre usan literalmente el término “Arrebatar”. 

   En su lugar podemos escuchar también otras frases y terminologías similares tales como: “Quitar”, “Poseer lo que me pertenece”, “Conquistar lo   que es mio”, o “Si El Enemigo no suelta lo mio se lo vamos a ir a quitar en el nombre del  Señor Jesús”, pues, en esencia, es exactamente lo mismo.
  
Una de las  razones para predicar la falsa doctrina de “Arrebatar”, se encuentra en la mala interpretación, de (Mateo 11:12). En su contexto no se nos habla de arrebatarle algo a Dios, mucho menos  al diablo. 

“Pero desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo toman por la fuerza.” - Mateo 11:12.

¿En qué parte de este texto dice que debemos “arrebatarle” al diablo lo que es nuestro y hacerle “guerra espiritual por lo que nos ha robado?

Habla de arrebatar “Milagros a Jesús” ¿En serio? 

   Sacar una Palabra y torcerla, sin hacer  referencias otros versículos, hacer un buen ejercicio hermenéutico para tener una mejor comprensión de un  texto, nos habla de la manipulación de la palabra para enseñar cosas convenientes.

   En estos dos pasajes observamos de que el reino de los cielos está vinculado a la obra redentora de Dios en el hombre. “el reino de Dios”, significa que Dios mismo ha descendido en la persona de Cristo, se ha acercado a los hombres para darles salvación, para que vivan bajo el dominio y autoridad de Dios y sean trasladados de las tinieblas a la luz Admirable del Hijo de Dios”.

   Y si continuamos haciendo una correcta exégesis, nos podemos dar cuenta la primera vez que El  Señor Jesús se refirió al “reino de Dios, fue llamando los hombres al arrepentimiento: 

   “Desde entonces comenzó El  Señor Jesús a predicar y decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.” (Mateo 4:17). 

   También vemos a El  Señor Jesús en (Mateo 4:23), proclamar el evangelio, no arrebatar al Padre Milagros, Para el Señor, esta, era Su tarea principal.

   Digamos que lo que más le urgía al Señor Jesús  decirles a las personas que

“LA SALVACIÓN HA LLEGADO Y DEBERÍAN DARSE PRISA, PARA OBTENERLA, NO HUIR DE ELLA.”

El Reino de Dios,sencillamente, no habla de prosperidad o de salud, no esos dos capítulos. No hace referencia a bendiciones materiales, milagros, sanidades, prosperidad material, ni carro nuevo, ni una vida feliz aquí en la tierra. 

   Cuando leemos (Mateo 6:31-33), vemos claramente lo que realmente El  Señor Jesús nos ordena y enseña: 

“31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o con qué seremos vestidos? 32 Porque los gentiles buscan con afán todas esas cosas, pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas ellas. 33 Buscad, pues, primeramente el reino y la justicia de Él, y todas estas cosas os serán añadidas.”

   Es triste ver como se enseña hoy en estas instituciones a afanarse por las cosas materiales, “Arrebatando” todo lo que necesitan. ¿Que pasa con la Fe?

  Nuestro Señor Jesús dice que estas son cosas que “serán añadidas” no vendrán por “Arrebatamiento que le hagamos a Dios”, tampoco las tiene el diablo en su poder. Dios tiene cuidado de nuestros cuerpos (salud y alimentación y vestidos) y de cualquier cosas que necesitemos. DE TODO!

25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer, ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? 26 Mirad las aves del cielo, que no siembran ni siegan, ni recogen en graneros, y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?27 Y ¿quién de vosotros puede, aun afanándose, añadir a su estatura un solo codo? - Mateo 6:25-27. 

NO HABLA DE ¡YO ARREBATO!

8 Porque todo el que pide recibe, y el que busca halla, y al que llama a la puerta, se le abre. 9 O ¿qué hombre hay de vosotros, que si su hijo le pide un pan, le dará una piedra? 10 O si le pide un pescado, ¿le dará acaso una serpiente? 11 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre celestial dará cosas buenas a los que le piden! Mateo 7:8-11. 

NO HABLA DE ¡YO ARREBATO!

7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis, y se os hará. 8 En esto es glorificado mi Padre: en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos. 9 Como el Padre me amó, también Yo os amé; permaneced en mi amor. 10 Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; como Yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. 11 Estas cosas os he hablado para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea completo. Juan 15:7-10. 

NO HABLA DE ¡YO ARREBATO!

   Si nosotros valemos más que las aves que vuelan y se posan en los árboles,  por qué razón los hijos de Dios, que valen mucho más que las aves, en lugar de tener fe que recibirán la provisión de las manos de Su Padre celestial, se dirigen a las “manos” de satanás a arrebatarles cosas. ¿No les parece insensato? En El  Señor Jesús habita toda la plenitud de la deidad, de tal manera que: “arrebatar, no es bíblico”. 

   No tenemos nada que arrebatar, todo fue comprado a precio de sangre en la cruz por nuestro amado salvador Jesucristo, al cual sea gloria y honor, ahora solo nos resta permanecer en Él, ya sea en la prueba, en el sufrimiento; en lo mucho y en lo poco, sabemos que nuestra morada esta en los cielos y un día estaremos con Él. Nuestras coronas son allí. ¿Por qué perseguirlas aquí?

   En la última parte del versículo de (Mateo 11:12), una vez más, cuando leemos (Lucas 16:16), El  Señor Jesús claramente está diciendo que aquellos que responden o responderán al llamado del evangelio “se esfuerzan por entrar en él”.

16 La ley y los profetas llegaron hasta Juan. Desde entonces el reino de Dios es proclamado, y cada uno entra en él con violencia. - Lucas 16:16.

   El incalculable valor del sacrificio de Cristo, ha sido ofrecido de forma gratuita para nosotros. Pero que el pueblo de Israel rechazó “el reino de los cielos”, porque querían un rey que los liberara del imperio romano, no un niño nacido en un pesebre, hijo de un carpintero, menos ver al su mesías morir por cruz. La imagen de El  Señor Jesús, no les garantizaba la estabilidad que ellos estaban buscando.

   Esto sucede hoy día, pues muchos quieren la gloria de Cristo, pero no quieren su cruz. No están dispuestos a padecer la “VIOLENCIA” que  es la real que viene, cuando aceptamos el reino de los cielos.

   Para aquellos que no estaban dispuestos a aceptar el mensaje del reino de los cielos, el Señor El  Señor Jesús hace una fuerte advertencia en (Mateo11:20-22).

¿Qué sentido el reino de los cielos representa violencia para los que desean entrar en él?

29 Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; porque más te conviene que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. - Mateo 5:29

   Entonces entendemos que muchos la forma de pensar del reino de Dios y Seguir a El  Señor Jesús, significa que podremos perder amistades y hasta familiares que no quieren saber de Cristo, incluso hasta nuestra propia vida. 

34 No penséis que vine a traer paz a la tierra. No vine a traer paz, sino espada. 35 Porque vine para poner en disensión al hombre contra su padre, y a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra, 36 y los enemigos del hombre serán los de su casa. - Mateo 10:34 
(representa violencia para los que desean entrar en él). 

26 Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre y a la madre, y a la mujer y a los hijos, y a los hermanos y a las hermanas, y aun también a su vida, no puede ser mi discípulo.27 Cualquiera que no carga su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo. Lucas 14:26 
(representa violencia para los que desean entrar en él).

25 El que ama su vida, la pierde; y el que aborrece su vida en este mundo, la guardará para vida eterna. (Juan 12:25) (Representa violencia para los que desean entrar en él) 8 Y ciertamente aun considero todas las cosas como pérdida por la superioridad del conocimiento de El  Señor Jesús el Mesías, mi Señor, por el cual perdí todas las cosas, y las tengo por estiércol, para ganar al Mesías, (Filipenses 3:8) 
(representa violencia para los que desean entrar en él).

   Hermanos recordemos que el reino de los cielos, se entra por una puerta estrecha (Mateo 7:13), no todos quieren entrar o puedes entrar, algunos escogen el camino ancho, por eso “Los violentos son los que entraran”. Aquellos que responden a este evangelio, tendrán que ser “violentos” o esforzados,  pues servir a Cristo con todo puede que nos cueste la vida misma.

Ahora pueden entender que no tiene nada que ver con perder el tiempo, “arrebatándole” cosas a El  Señor Jesús, o quitándoselas al diablo!

   Otra cosa también importante Satanás no puede quitarnos nada si Dios no se lo permite, cristianos “peleando” con el diablo para quitarle lo que es de ellos, la Biblia nos enseña que satanás no puede tocar lo que somos y lo que Dios nos ha dado. La famosa canción “arrebato todo lo que e diablo me ha quitado” no es más que una letra llena de pasiones del alma, o un grito desesperado, o en el peor de los casos un cebo, para que los peces incautos,    vengan y coman la carnada, para después ser esclavos de falsos evangelios, en especial el de la “prosperidad”.

   Un ejemplo fue la vida de Job, Dios mismo entregó en manos de satanás todas las posesiones de Job (Job 1:11). No vemos a Job, entrando al “campo” del diablo arrebatando ni tampoco vemos a satanás actuando sin el permiso de Dios. Cristo mismo le dijo a Pedro “he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo (Lucas 22:31)”; Una vez más nos recuerda el cuadro la historia de Job, donde satanás pide permiso a Dios.

   Dios, que es soberano,  por lo tanto, “arrebatar” es una pérdida de tiempo. Es mejor invertir nuestro tiempo, testificando, alabando, bendiciéndole como Job hiso a Dios. Por estas razones tenemos que tener muy claro que nadie nos puede separar de las manos del Señor El  Señor Jesús. 

“y Yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, y nadie las arrebatará de mi mano.” (Juan 10:28)

¿Cuánto más si él tiene el poder de conservar las bendiciones que nos ha dado: “nuestra salud, familia, trabajo o cosas materiales si así lo desea”?

   En el mismo pasaje de (Mateo 11:27)  el Señor Jesús dice que todas las cosas están en su poder. Esto quiere decir, que el diablo no es dueño de nada de lo que Dios nos ha dado en Cristo: (11:27). “Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre…” Si El  Señor Jesús posee TODAS LAS COSAS, significa que el diablo no posee nada. Nadie conoce plenamente al Hijo sino el Padre, y nadie conoce plenamente al Padre sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar. Es el Señor el que revela si él LO QUIERE. Nos dice, que no somos nosotros quienes sabemos las cosas que se nos va a dar.

   Dios tiene en pleno control las cosas que necesitamos. Lo mejor que podemos hacer es enfocarnos en el reino de Dios. “Venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo”. Dios domina, Dios Reina, Dios gobierna, Él es soberano, Él da y Él que quita. Debemos decir NO a la doctrina falsa de “ARREBATAR” y vivir confiados en que con Cristo estamos completos y hemos sido bendecidos con toda bendición.

"Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesús, el Mesías, quien nos bendijo en los cielos con toda bendición espiritual en el Mesías,"  Efesios 1:3


Gracia y Paz


Palabra de YHVH-Palabra de Dios la verdad bíblica-Plantando iglesias bajo la gracia.
Extractos (Ideas) tomadas de algunos hermanos, de sus publicaciones, Diccionario de concordancias Strong. Biblia usada: Biblia Textual 3ra edición.

3 comentarios:

  1. Muy buena la tesis. Estoy totalmente de acuerdo. Felicitaciones

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  2. muy buena enseñanza gracias es correcto

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  3. Gloria a Dios por tremenda enseñanza. Dios te bendiga siempre y continúes siendo de edificación al Cuerpo de Cristo. Hna Maribel Otero de Goitia

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